Bombero de Nueva York
¿He de reprochar a los astros sus lectores
Si cuando el sol nos quema
El horóscopo lo blasfema?
Ya se sabe :
A veces en un año
Algunos cuerpos celestes fundan órbitas,
Pero la malafortuna que cargan,
Eso ignoramos.
Aun así, hay contentos,
Esos huraños
Incapaces de cambiar el rumbo,
Y que prefieren jodernos con miles de tumbos
Para beneficiarse de una suerte
Que deberíamos llamar celeste
Aunque nos cueste…
Porque de alguna parte les debe venir
La fuerza para hincarnos
Y hacer que de esa posición
Nazca la extraña adoración
Que catapulta sin penas
Su reelección.
Ay, me traiciono,
Ya mi poema habla de un país sin querer
Y de los deseos de un pueblo
Que tira del lazo que más lo aprieta.
El pobre huérfano…
Aún cree en el retorno duro del padre,
Y aplaude sus reprimendas.
Quizás resbale el destino
Y termine distinto
Al que tan pocos quieren para tantos,
Que finalmente tanto trabajo,
Trabajo,
Trabajo
No sea remunerado a destajo.
Si el Gran Obrero
No quiere otra empresa
Que la demolición,
Otras manos deben de haber
Que mejor logren
De a muchos
Lo que ninguna estrella
Aún se atreve a predecir.
Diciembre 2011
¿He de reprochar a los astros sus lectores
Si cuando el sol nos quema
El horóscopo lo blasfema?
Ya se sabe :
A veces en un año
Algunos cuerpos celestes fundan órbitas,
Pero la malafortuna que cargan,
Eso ignoramos.
Aun así, hay contentos,
Esos huraños
Incapaces de cambiar el rumbo,
Y que prefieren jodernos con miles de tumbos
Para beneficiarse de una suerte
Que deberíamos llamar celeste
Aunque nos cueste…
Porque de alguna parte les debe venir
La fuerza para hincarnos
Y hacer que de esa posición
Nazca la extraña adoración
Que catapulta sin penas
Su reelección.
Ay, me traiciono,
Ya mi poema habla de un país sin querer
Y de los deseos de un pueblo
Que tira del lazo que más lo aprieta.
El pobre huérfano…
Aún cree en el retorno duro del padre,
Y aplaude sus reprimendas.
Quizás resbale el destino
Y termine distinto
Al que tan pocos quieren para tantos,
Que finalmente tanto trabajo,
Trabajo,
Trabajo
No sea remunerado a destajo.
Si el Gran Obrero
No quiere otra empresa
Que la demolición,
Otras manos deben de haber
Que mejor logren
De a muchos
Lo que ninguna estrella
Aún se atreve a predecir.
Diciembre 2011